Nuestros Fans

Detesto a los que me privan de la soledad y sin embargo no me hacen compañía. Irving Yalom


La esperanza es desear que algo suceda,
la Fé es creer que va a suceder,
y la valentía es hacer que suceda.

viernes, 11 de julio de 2014

El club de fans de Pili y Mili. 8 apellidos andaluces

A petición popular, cambio la etiqueta de "maripili single" por "el club de fans de Pili y Mili". Si queréis saber por qué, echadle un poco de imaginación, un poco de picante y daréis con la clave. 


8 apellidos andaluces. Qué contaros de él! señorito andaluz, pelo engominao p'atrás, pulseritas y colgantes tipo Pocholo, nicky con el caballito de polo representativo de la marca bien bien grande y pose de "tranquila nena, ya he llegado yo".

Se tiró toda la semana haciendo bromas sobre dónde dormiríamos el sábado, me preguntaba si roncaba, me aseguraba que él no, me decía que ya tenía el neceser preparado....sin embargo, tan gallito como quería ser, y luego cuando le dije a bocajarro que le agradecía tanta sinceridad, y que en honor a la verdad (y si yo también era sincera), podía asegurarle que ese día no triunfaría, negó la mayor y me dijo que estaba de broma y que él no daba nada por supuesto. 

Aún así, el mismo sábado y ante la enésima broma, le aseguré que esa noche no se me acercaría ni con un palo. Que estaba en "esos días" y mi religión no me permitía mantener relaciones sexuales. Bueno, mi religión y las pocas ganas de frotar, por supuesto. Ante esto, me dio las gracias y me despidió. Mi lacónico "vale. Suerte" debió picarle el orgullo porque un par de horas después, estaba insistiendo en ir al menos a tomar café. Sin compromisos. Sólo café. 

Conversación agradable y un hombre no tan duro como quería hacer creer ni de lejos tan seguro de sí mismo como aparentaba, luchaba por salir a la luz. Cuando se dio cuenta, lo redujo al rincón más escondido de su alma, pero a mi ya me había ganado. No sé cómo narices terminamos en mi casa. 

No saltó la alarma cuando dijo que tenía calor y que se quitaba la camisa. Imagino que su perfecto y esculpido torso con absoluta ausencia de vello, hizo que me desconcentrara un poco de lo importante: sus abdominales!!!!! joder qué abdominales!!!!!! En mis manos tenía la legendaria tableta de chocolate que nunca había visto en la vida real.
Sin apenas darme cuenta, su lengua jugaba con mi campanilla provocándome tales arcadas que casi la palmo ahí mismo.
¿Pero qué narices pasa? ¿dónde aprendieron a besar los andaluces de mi generación?
Cuando recuperé el ritmo normal de la respiración y las nauseas pararon, miré al causante de mi malestar y mis ojos toparon con el cuerpo masculino REAL más bonito visto en toda mi vida!!!!!!! y desnudo. Patético. ¿Quién coño le había dicho que podía quitarse la ropa?
Cuando le pregunté por el hecho y le recordé que estaba con la regla, tan sólo acertó a balbucear: "podíamos hacernos unas pajillas, ¿no?".
Aguantando la risa, y gracias a mis grandes dotes como actriz dramática, conseguí convencerle de que estaba absolutamente escandalizada por el atrevimiento, le pedí que se vistiera y se fuera. 
Y así, casi sin poder saborearlo, la fantástica visión de un maravilloso cuerpo desnudo se evaporó, dando paso al nicky del caballo de polo, el pelo engominado, los collares y las pulseras.

Como si de un reloj suizo se tratara, cada noche sobre las 23h tengo un wassap dándome las buenas noches y recordándome que se quedó con ganas de catarme. Snif. 

viernes, 4 de julio de 2014

Maripili single. El déjà vu

Hola corazones.
He decidido iniciar una nueva etiqueta en este blog que se llamará Maripili single e irá acompañada de un subtítulo con el apodo del sufridor de turno.

El verano ya ha venido y nadie sabe cómo ha sido. Así que mi estado del wassap es "se abre la veda de la caza del conejo". Os aseguro que es un estado muy muy rentable. Ya ha atraído a 4 citas. 
Además de eso, me he metido en un grupo de singles de la ciudad y me he apuntado a los dos talleres que os conté el otro día: el de swing y el de hacer un musical. 

Hoy os contaré mi primera experiencia single. 
El afortunado fue el déjà-vu. Casi 50 años, 2 hijos y un romanticismo que no le cabía en el cuerpo. Imagino que por eso se lo dejó en casa, para no ir cargado. 
El tío majete llegó tarde a la cita por lo que entramos en el cine con la película empezada. Tuvo el detalle de invitarme a las palomitas y la bebida. Durante la peli me frotaba el brazo como si esperara que saliera un genio que le cumpliera 3 deseos, pero no tuvo suerte. 
A la salida del cine me llevó a pasear por una zona recién abierta, preciosísima, que era el propio parking de la zona comercial donde estábamos. Y un ratillo después, bajo la bonita luz del neón del carreflus, me besó. 
Digamos, que la noche iba mejorando por momentos...

Intenté varias tácticas, como por ejemplo, dejar que me besara como el que saca a correr al perro, con la esperanza de que se canse y que luego esté más centrado en el adiestramiento, pero no funcionó.
Luego intentaba quitarle la boca y ponerle el cuello, al menos, podría respirar mientras! pero tampoco hubo suerte. Digamos que si ya me hubiera hecho el tatuaje que tengo pensado, me lo habría borrado. 

Desesperada, le dije que o nos íbamos a tomar algo, o me iba a casa, que estaba muy cansada bla, bla, bla. Y eso sí funcionó. Me llevó a un bar cercano. En un barrio cercano. Con gente muy cercana. Que yo no soy racista y el problema no fue la gente, fue el poco tacto al ser una primera (y mucho me temo que última) cita, me llevó a una barriada de gitanos, a un bar cutre de barrio de patatas bravas y chocos. Uuuuufffffff

Ya, más que jarta, le dije que me iba a casa. Y aunque parezca imposible, lo conseguí. Tan sólo tuve que soportar un último beso de despedida con el agradable aroma del cubo de basura que había al lado de donde me indicó que podía aparcar el coche.

jueves, 3 de julio de 2014

Abrumada

El otro día oí en la radio que la pregunta ¿por qué me pasa a mi esto? debería cambiarse por ¿para qué me pasa a mi esto? y así seríamos menos pesimistas y no tendríamos tantas depresiones.
Y ya está. Es así de fácil! porque ahora que las cosas van bien, cada día veo más claramente para qué me pasan las cosas menos.....más......eso, más farragosas de vivir.

Me siento feliz, pletórica, fuerte, emocionada, entusiasmada, abrumada...sí, me siento abrumada por la cantidad de cosas que pueden llegar a pasar tan sólo cuando cambias el prisma de visión.

Dentro de un par de semanas se cumple un aniversario. Hará 11 meses que lucho cada día por ser feliz. 
Antes no era así, antes luchaba cada día por sobrevivir, por encontrar una razón para abrir los ojos por la mañana, buscaba la forma de pasar el día lo más tranquila posible. Sentía hastío, soledad, rutina, infelicidad, insatisfacción, dependencia....Y un día, al igual que dejé el tabaco y otros vicios y dependencias tóxicas, dejé de tenerme lástima y decidí ser feliz.

El caso es que ya sé para qué. Para ser feliz. Para eso ocurren las cosas, para ser feliz. 
Todo el mundo busca a alguien para ser feliz. Yo también busco a alguien, me busco a mi, y cuanto más voy conociendo, más feliz soy. 

Pero lo de ahora....lo de ahora es una columpiada del de arriba. 
Empezó cumpliendo un sueño: hacer teatro. Y ahora, ha conseguido enseñarme el camino para cumplir otro: hacer cabaret.
No ha podido ser antes. Ha tenido que ser ahora. 

¿Sabéis esa sensación de felicidad y satisfacción plena? eso es lo que siento. Absolutamente abrumada por la magnificencia de la vida.