Si te asomas al balcón de la vida, te puedes dar cuenta que vivimos demasiado deprisa. Siempre corriendo, pendiente de las tecnologías, pendiente del reloj. En un día cargado de tantas obligaciones que no nos percibimos todo lo que descuidamos.
Solemos encontrar semejantes a nuestro paso, en paradas de autobús, metro, taxi, en coche... Todos somos iguales o por lo menos todos tenemos una necesidad común, AFECTO.
Por mucho que queramos, el ser humano no sabe estar solo. Algo tan sencillo como una sonrisa, puede cambiar la actitud de una persona.
No hace mucho, se organizó en Madrid un evento en que personas de a pie regalaban abrazos por la calle diferentes viandantes. Fue algo fantástico, me cautivó el poder que puede tener un gesto tan humano y tan sencillo así como la reacción de la gente en cuestión.
¿Sabéis lo que mas me llamó la atención?, el hecho de ponerte delante de un desconocido y decirle "TE REGALO UN ABRAZO" y que observar su reacción. Ver la sonrisa de aquelllas personas, el brillo de los ojos, emociones y sobretodo ese GRACIAS, sin pedirlo, sin esperarlo... Realmente es una sensación fantástica.
Creereís que estoy loca, o igual no, pero pararos por un momento a pensarlo. Es tan sencillo y barato sorprender al ser humano, que deberíamos ponerlo en práctica más a menudo, es muy gratificante.
La vida es algo efímero, que estamos en la obligación de disfrutar mas de estos pequeños gestos, es una buena terapia.
un abrazo de menos de 7 segundos no cuenta... y si no, pregúntaselo a maripili....
ResponderEliminarPues entonces habrá que hacer que duren 7 segundos, para que sirvan para algo
ResponderEliminarEste comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarEste comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarMe he pasado toda mi vida pensando que eso eran chorradas. Ahora pienso exactamente lo contrario.
ResponderEliminarLa maripuri!! OMG!