Nuestros Fans

Detesto a los que me privan de la soledad y sin embargo no me hacen compañía. Irving Yalom


La esperanza es desear que algo suceda,
la Fé es creer que va a suceder,
y la valentía es hacer que suceda.

lunes, 2 de diciembre de 2013

Quemando puentes

Este fin de semana me ha dado por darle vueltas a un asunto y es que no se puede decir que haya sido precisamente una monjita en mi vida sentimental. Digamos que empecé a rezar muy tarde, pero he recuperado el tiempo perdido.
Por otro lado, una entrada de uno de mis blogueros preferidos: Mr Riffic, me ha hecho pensar sobre los "duelos".
Soy una persona que respeta mucho los recuerdos de una persona, es decir, tuve un amigo con el que escalé en roca, pues creo que en respeto a ese recuerdo, (no por miedo, por supuesto) no volveré a practicar escalada. Con un novio que tuve hace mucho tiempo, hicimos nuestro un diálogo de la película "una proposición indecente" y aunque en alguna ocasión lo he intentado recuperar con alguna otra pareja, el efecto que me provocaba con aquel novio y el amor con el que decía aquellas líneas, no ha vuelto a repetirse. Mi exmarido flipa con Red Hot chilly peppers, pues yo ya no puedo escucharles. Y así, millones de historias más.
En definitiva, lo que nunca pensé es que un hombre, con lo simples, poco románticos, burdos y rudos que son, pudieran sentir o mantener duelos. A mi me gusta llamarlo "ensuciar un recuerdo".

Hasta aquí todo muy bonito. El problema viene después, cuando ves que los recuerdos que quieres mantener limpios son tantos, que ya te quedan muy pocas posibilidades de crear recuerdos nuevos. 
Lo mismo me pasa con los novios. No podría salir con un tío que me recuerde a algún ex. 
En este asunto también estoy quemando todos los puentes porque he salido con:
- El malote que te castiga y te hace sufrir y luego resulta que era el más dulce y el que más te ha querido.
- El empollón con un lado divertido
- El cojo con el que empiezas a entender, y le muestras a todo el mundo, que la belleza está en el interior.
- El finolis con cultura que termina siendo un gilipollas tiquismiquis que seguro que se ponía guantes hasta para sujetarse la chorra para mear. 
- Por supuesto el drogadicto y alcohólico al que toda mujer sueña con rehabilitar.
- El hombre que cualquier madre querría para su hija 
- Y el último. Del que prefiero no opinar. 

Eso hace que me queden muy pocos "hombres-tipo" vírgenes, es decir, de los que no tenga ya un recuerdo.

Habría una posible solución que sería esperarme unos cuantos años para tener pareja estable. Más o menos hasta que cumpla la cincuentena o sesentena y entonces podría retirar el listón para ponerlo de nuevo.
¿Cuál sería en esta ocasión el rasero de medida? las enfermedades. 
Podríamos empezar con un señor con problemas de tensión. Un diabético no me valdría porque ya estuve casada con uno, el problema es que a partir de determinada edad todos seremos diabéticos así que me queda poco márgen de acción, más o menos entre los 50 y 65.
Luego podríamos eliminar a los hombres con problemas de próstata. Mas tarde con problemas respiratorios o circulatorios.
A una media de 1 ó 2 años por relación, cuando me quiera dar cuenta ya estoy jubilada y en Benidorm cantando los pajaritos con la Marijuli.
La buena noticia es que si mi falta de memoria a corto plazo avanza tan rápido como lo ha hecho en los últimos 10 años, para cuando tenga 70 tan sólo seré capaz de recordar (y a duras penas) el camino desde el hotel al guateque, lo cual facilitará encontrar nueva pareja. 

4 comentarios:

  1. Jaaaaaaaaaaaajajajajajajajajaja, anda queeee... no me esperaba este final para este principio, muy bueno.
    ¿Sabes qué? a mí me pasa igual con los recuerdos. El grupo que empecé a escuchar con aquel novio no me gusta que le guste a mi chico, la canción que me gustaba escuchar con mi exmarido no quiero escucharla más porque me da repelús (¿cuánto tarda eso en pasarse?), cosas que en algún momento me gustaba hacer con alguien ahora ya no quiero hacerlas por lo mismo. También me pasa al revés, me aterra descubrir algún recuerdo de mi chico, algún grupo, película o lugar que le recuerde demasiado a alguna persona.
    Pues la verdad es que es una idiotez, pero eso de los recuerdos me pesa mucho a mí también, me alivia saber que no soy la única...

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. buf pues no sé cuánto tarda en pasarse, la verdad. Imagino que cuando el amor o el odio por aquella persona se pasa y tan sólo queda un cariño como el que puedas sentir por cualquiera o incluso, por un perrillo abandonado.
      O también puedes luchar para que los recuerdos malos se vuelvan buenos intentando volver a vivir esa experiencia con quien estés segura de querer recordarla.

      Y no tranquila, no estás sola, las neuróticas solemos ir en manada. Te apuntas?

      Eliminar
  2. Te falta quedar con un Mr.Rific y "tacharlo de / incluirlo en" la lista de posibles estereotipos del sexo contrario :)

    Tienes razón, a estas alturas de la película nuestra capacidad de asombro es mínima, pero por suerte no estamos inmunizados y detrás de ciertas esquinas surgen no pocas sorpresas...

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. INCLUIRLO INCLUIRLO INCLUIRLOOOOO!!!!!!! sería una memorable muesca en mi revolver.
      Yo a lo que voy a tener que ir a la esquina como siga con estos problemas económicos, va a ser a buscar clientes

      Eliminar