Este es el último libro que me he leído.
Simplemente fantástico.
La contra portada lo resume así:
"En la vida diaria ¿hay lugar más seguro para los deseos secretos que el mundo virtual? Leo Leike recibe mensajes por error de una desconocida llamada Emmi. Como es educado, le contesta y como él la atrae, ella escribe de nuevo. Así, poco a poco, se entabla un diálogo en el que no hay marcha atrás. Parece sólo una cuestión de tiempo que se conozcan en persona, pero la idea los altera tan profundamente que prefieren posponer el encuentro. ¿Sobrevivirían las emociones enviadas, recibidas y guardadas un encuentro "real"?"
Para mí ha sido uno de los libros más bonitos que he leído. Tanto por la historia de amor como por la realidad que se escapa de entre sus líneas.
Sin ir más lejos, a mi Santo le conocí en una situación parecida. Pero fuimos más listos y antes de conocernos enteramente por email, nos conocimos en persona.
El final es espectacular y sorprendente, aunque, para mí, previsible (por desgracia).
Me gustaría resaltar uno de los párrafos más bonitos de todo el libro y con el que me siento totalmente identificada en estos momentos:
Emmi le escribe a Leo:
"¿Has vuelto ya del teatro? Hoy no puedo dormir. ¿Te he hablado alguna vez del viento del norte? No me sienta bien el viento del norte cuando tengo la ventana abierta. Sería bueno que me escribieras unas palabras más. Escribe simplemente: pues cierra la ventana. Entonces te contestaré: con la ventana cerrada no puedo dormir."
Después de cruzarse unos cuantos emails entre ellos, aparentemente sin sentido, pues hablan de enviarse un alargador por email como un adjunto de texto, Emmi escribe:
"¡Ah..., dormiré a pierna suelta gracias a tí y a tu cable!"
Leo le responde:
"Ahora que sople el viento del norte todo lo que le dé la gana."
Y ella:
"Leo, te estimo mucho, mucho. Eres bueno contra el viento del norte".
Cuando estás luchando contra el viento del norte, como me encuentro yo en estos momentos, lo único que hay peor en esta vida es que ese viento lo provoque tu Leo particular.
Ahora que te leo rememoro esa lectura. Me impactaron bastantes diálogos entre ellos, y como se iba construyendo la intimidad entre ellos sin quererlo, pero queriéndolo(sinó no habría pasado). Uno se cree a resguardo de los sentimientos por estar aparentemente en distancia, física, y de realidades. Pero las relaciones se construyen, relacionándose,y esmucho el poder de las palabras. El final, aunque predecible, me marcó mucho. En realidad soy bastante Emmi, lo reconozco. Cómo habrá hecho para escribir una segunda parte? besos!
ResponderEliminarHe de decir que la segunda parte sobraba, pero que sea un secreto entre tú y yo...tenía que haber cortado con el primer libro.
ResponderEliminarDe todas formas, estoy escribiendo un post donde hablo de él.
Millones de veces me he enamorado de personas por email y este libro me tocó en lo más profundo....Y creo que Emmi toma la decisión correcta, ya que las relaciones por email no deben salir del email nunca! a no ser que se conozcan desde el principio, claro...